piscina limpia

Tiene una piscina limpia en casa requiere atención a varios factores. Es necesario observar el clima del día, comprar el equipo y los productos correctos y dedicar algunas horas a la semana a ensuciarse las manos.

Además, la limpieza de la estructura debe realizarse con frecuencia, así como el tratamiento del agua y la limpieza de toda el área externa. Con tantas tareas, es común que a muchas personas les cueste realizarlas y acaben aprovechando poco su espacio.

Por eso, para que puedas mantener bien la piscina y no tengas más problemas, hemos preparado esta lista con las principales dificultades de todo el procedimiento. ¡Sigue leyendo y descubre cómo resolverlos!

1. La piscina no tiene un sistema de filtración automatizado

El agua cristalina es el resultado de un proceso de filtración eficiente. Y solo se puede hacer si el usuario tiene un buen sistema automatizado. Periódicamente es necesario encender un simple sistema de filtración y es común que se olvide esta tarea: el resultado es un agua turbia y sucia, no apta para el baño.

Sin embargo, de nada sirve automatizar el sistema si no se programa correctamente. Lo ideal es que la piscina se filtre durante al menos 8 horas para piscinas residenciales; y al menos 6 horas para comerciales.

Comprar bombas y filtros de calidad para contribuir a la eficacia de esa acción. De esa manera, el proceso es más eficiente y usted tiene una piscina limpia sin ninguna preocupación por los fracasos humanos. Otra buena idea es comprar un filtro y una bomba portátiles.

2. La piscina limpia debe tener control de pH

Muchas personas tienen dificultades para mantener bajo control el pH del agua. Sin ella, no tiene sentido mantener al día el cloro o la ozonización de la piscina, ya que las sustancias no funcionan correctamente en la limpieza. Así que trate de mantenerlo regulado diariamente en torno a 7.2, el número correcto para las piscinas.

Recuerde que para preservar la piscina limpia, siempre debes revisar este factor, o el agua podría estar llena de algas, bacterias y un horrible aspecto verdoso. Si tiene dificultades para ajustar este detalle, no dude en buscar asistencia técnica.

3. El control del cloro se pasa por alto fácilmente

El control del cloro es una tarea sumamente importante, tanto para mantener la piscina limpia y no dañar la salud de los asiduos. Si su nivel es bajo, esto también se convierte en un caso donde las algas, hongos y bacterias pueden proliferar y causar enfermedades en las personas.

Siempre intente mantenerlo configurado en aproximadamente 1,5 ppm y tenga cuidado de no caer por debajo de 0,5 ppm. Hoy en día, hay varios modelos en el mercado. dosificadores de cloro que facilitan esta actividad para que no corra ningún riesgo de cometer errores. Los sistemas automatizados también pueden ser una alternativa para esta función, basta con buscar.

Si aún consideras que todos estos pasos son muy difíciles de resolver y no encajan en tu rutina, lo mejor es que busques un equipo que pueda hacer el trabajo. Tenga en cuenta que el bienestar de su familia es tan importante como la estética de su piscina, y todos merecen ese cuidado especial.

Y tú, ¿tienes alguna otra dificultad para mantener el piscina limpia ¿para contar? ¿O conoces otros tips para solucionar los ya mencionados? ¡Comenta y participa!