Una piscina al aire libre rodeada por una valla negra de Sodramar en el cielo de Paraisópolis en São Paulo, Brasil, con grandes edificios residenciales visibles al fondo.

Las piscinas son excelentes maneras de refrescarse durante el verano. No hay nada mejor que zambullirse en agua fría cuando el sol está fuerte y broncearse la piel. Pero cuando la temperatura ya no es tan alta y persisten las ganas de nadar, no es agradable tirarse al agua helada. Mucho menos quedarse adentro mientras te relajas. Por ello, muchos prefieren instalar intercambiadores de calor en sus piscinas. Pueden simplemente romper el frío o convertirlos en grandes jacuzzis.

Para ayudarte a hacer la elección perfecta, hemos preparado una guía completa. Siga leyendo este artículo hasta el final y comprenda cómo elegir uno termocambiador ideal para tu piscina.

¿Qué es un intercambiador de calor?

Um termocambiador es un sistema utilizado para mantener la piscina caliente. Calienta el agua a través de un sistema de paso donde dos tubos intercambian calor y devuelven el agua caliente a la piscina. Se controla digitalmente. Es decir, especificas la temperatura que quieres alcanzar y cuando eso sucede, deja de funcionar. De esa forma, puedes ahorrar hasta un 70% de lo que gastarías en calentadores comunes. Cuando ya esté a la temperatura ideal, basta con utilizar fundas térmicas y protectoras y tendrás una piscina perfecta para relajarte.

¿Qué tan grande es tu piscina?

Lleva tiempo calentar toda el agua de una piscina. Si calentar agua para una taza de café lleva unos minutos, imagina una piscina entera. Por lo tanto, es natural concluir que cuanto mayor sea la capacidad del calentador, más rápido calentará toda el agua. Sin embargo, también debemos tener en cuenta el hecho de que no queremos hervir toda la piscina. Por lo tanto, lo que buscamos aquí es el equilibrio entre la cantidad de agua disponible y la capacidad de la termocambiador.

Así que, antes que nada, a la hora de elegir tu modelo, ten en cuenta el tamaño de tu piscina y el volumen de agua que contiene. Cada uno de los modelos tiene su capacidad ajustada en función de estos dos factores. Desde las piscinas más pequeñas, con hasta 18 metros cuadrados, pasando por los modelos intermedios entre 47 y 60 metros cuadrados, hasta las más grandes con una superficie de 105 metros cuadrados.

¿Cómo preparar mi proyecto para el intercambiador de calor?

La climatización de su piscina debe formar parte de su proyecto de instalación de esta zona de ocio. Esto se debe a que debe tener su lugar correcto, preparado y designado para recibirlo. Estos no son equipos grandes, pero cuanto más poderosos sean, más grandes serán. De esta forma, el más pequeño de ellos estará a 70 centímetros del lado más grande, mientras que el más grande estará a poco más de un metro del mismo lado.

Um termocambiador Es todo lo que su piscina necesitaba para ser perfecta. Además de bucear en los días calurosos, podrás extender su uso durante todo el año. Además, lo ayudan a mantener baja su factura de energía. Pero es importante que te asegures de que el tuyo esté certificado por INMETRO antes de instalarlo en tu piscina.

¿Estás pensando en climatizar tu piscina? Cuéntanos más sobre tus ideas en los comentarios.